28.8.07

Minoría Siniestra *

Dicen los que saben que entre los 5 y 6 años se manifiesta –y concreta- la lateralización simétrica del cerebro.
De chico, durante la primaria, mi madre acudió a mis maestras para pedir consejo al respecto. En ese entonces no era tan común ,como en algunos años más tarde, que un párvulo tenga la distintiva característica de usar la mano izquierda. Ellas le dijeron que no impidiera que el crío haga las cosas “de otra manera”.
Mi madre no se fue muy convencida pero les hizo caso.
La cuestión era que el mundo había sido fabricado para el lado derecho de su pantalla, señora.
Por ello, me tuve que acostumbrar a que las tareas las tenía que hacer, algunas, de manera un poco atravesada. O adaptarme.
Y elegí las dos opciones : si bien no tengo mucha memoria, estimo que me increparon para agarrar el tenedor –y comer toooda la comida existente en el plato- de manera más “normal”. Como eso no me complicaba la vida, y para terminar con protestas que yo no comprendía, empecé a tomar algunos elementos de la manera que –complacientemente- correspondía. Pero la tendencia corporal continuó manifestándose para el lado siniestro.
Aunque, insisto, el mundo fue creado de manera autoritariamente diestra.

En algunos países se denomina de manera despectiva al lado -poco santo- izquierdo.
Dios – el de la iglesia católica- sostiene las tablas de la ley sobre su mano derecha, igualmente Junior no quiso levantar polvareda al respecto y se sentó a su diestra en todo cuadro renacentista.
Pitágoras aconsejaba a sus seguidores ingresar en templos y lugares sagrados “por el lado derecho que es divino, y salir por el izquierdo, que representa lo enviciado (obsceno, corrupto, inmoral, licencioso, disoluto, contaminado).
En inglés, cack-handed modernizada con el leftie –o lefty- señala además aquello que sobra, que está de más, y puede ser descartado (o defecado).
En los desiertos beduinos, si alguna vez tienen el beneplácito de ser invitados a comer en esas tiendas tan arabescas, sentados sobre almohadones, les sugiero que no intenten tomar la comida con la mano “sucia”, mas cercana a las excrecencias del cuerpo, y lo hagan con la derecha, más próxima (¿?) a la pureza del corazón.
El universo mismo atenta contra nosotros, que aún seguimos siendo minoría. Los planetas y los electrones giran hacia la derecha. Incluso los relojes.
Un especialista –James de Kay- sostuvo que “los zurdos tienen la enervante costumbre de pensar elípticamente, mientras que los diestros lo hacen en línea recta. El concepto de acción de un zurdo para, por ej, viajar de A hasta B, pasará antes por Z. Ellos piensan de manera tortuosa y sin lógica alguna”.
Si bien es una generalización objetable, lo cierto es que fue tenida mucho tiempo –siglos- en cuenta para justificar la existencia de dementes. Y de artistas (da Vinci incluido).
Alguna encuesta, de esas que nunca faltan, ha sacado a la luz que los zurdos suelen –solemos- ser mejores y más imaginativos amantes (recordar eso de ir de A hasta B pasando antes por Z...) que los diestros.
Hace un par de meses, brotó la noticia de la Universidad de Oxford: aparentemente un gen sería el responsable de controlar la mayor o menor habilidad de una zona del cuerpo, siendo el primer gen que se puede asociar al uso distintivo de una o otra mano. Curiosamente el mismo estudio señala que los portadores de este gen tienen la propensión de desarrollar alguna que otra psicopatía.

Pero volviendo a mi niñez, con el tiempo pude esquivar la dictadura de tijeras, cuadernos, medios de transporte, picaportes, agendas, incluso palancas de cambio (de mi cochecito a pedal). Mi mano derecha (sin olvidar el pie, claro) tuvieron la deferencia de socorrer, no ante la falta de capacidad sino por puro dictamen del “derechismo” imperante, a la mano izquierda. Que así y todo, sigue teniendo la voz mandante en cualquier acción propuesta.
Algunos zurdos que he conocido, convertidos hacia la derecha durante su niñez, curiosamente presentaban una particular falta de orientación. Basta con hacerlos caminar 6 cuadras de manera irregular, para que no sepan hacia donde queda el lugar donde iniciaron la caminata.
Actualmente, toda una corriente permisiva dirigida a la orientación de padres respecto a la crianza de sus vástagos, ha dado origen a una mayor afluencia de zurdos.
Esto significa que llegará el día en que los planetas giren para el otro lado?
O que el diablo, zurdito por naturaleza y definición, se regocijará por la proliferación de más perfeccionados e ingeniosos amantes siniestros?

* sinister, izquierdo en latín.